jueves, 31 de octubre de 2013

Te hablo yo, tú Yo futuro

Waltercito,

Está bien, está bien. No te calentés...
Sé que no te gusta te llamen así. Perdón.

Te digo Wal. ¿Estás de acuerdo?
Te hablo yo, tú Yo futuro. Recién llego de visitar a Papá. En la misma casa donde vos vivis, viviste.

Papá está bien, renegando con su propio ser, carajeando. Vos ya sabés de que te hablo. ¿Pero sabes que? A pesar del carajeo sigue teniendo el DON de juntar a toda la familia. Hoy eramos 24. Estábamos tus hermanos y sus hijos; tus sobrinos. Mi mujer y mi hijo, tu mujer y tu hijo. Estaban las tías y los primos. La pasé muy bien. Muy. Verás, en el futuro muchas cosas han de cambiar. Pero No vuelan los autos, todavía, ni se terminó el mundo en el 2000. No tengas miedo. El mundo sigue tan loco cómo siempre. Y sigue habiendo comilonas con toda la familia y los amigos.
Habiendo hecho mi introducción quiero decirte que extraño muchísimo tus juegos sin competencia. Extraño esconderme cómo vos sin miedo a aparecer. Ahora me escondo 10 horas al día en mi trabajo deseando, pero a la vez con miedo, que aparezcan mis dones.
Extraño sentarme a mirar, solo a mirar, cómo juegan los chicos de la cuadra. Recién me encontré con dos de ellos. ¡Si si! Tus amigos. Vieras las buenas personas que son.
Ya no viven más en la cuadra, como Yo, pero todos tenemos a nuestras familias allá. Casualmente te recordaron…. Te recuerdan con sonrisa picara… pendejo hijo de puta. Así, tal cuál.
Claro, ahora la diferencia de edad no se nota, pero salí a defenderte, ¡a explicarles que tus bromas y picardía fueron producto de su abuso de edad! Nos reímos mucho. Cómo lo hacías, cómo lo haces vos a diario. Con ellos.
Extraño tus siestas con Mami. Extraño tu creatividad. Tu libertad.
Pero no todo es melancolía. Quiero ser justo, cómo te gustaba ser a vos:
Por que no extraño tu responsabilidad extrema, tu deseo de querer ser el número uno en el club, el que nunca quería tener notas bajas. A ese no lo extraño.
No extraño al Wal que temía por la muerte de su mamá. Ni tampoco el que temía a su papá cuando gritaba.
Ese Wal, siento, va quedando en el camino. De a poco.
Mantengo tu mirada. Los rulos. El rubio se me fue, lentamente.
Pero sigo tu filosofía sobre la amistad, de hecho, tus amigos son hoy, todavía, mis amigos. Esos que supiste empezar a conocer en el jardín de infantes… Si si, Santi, Pablo, Diego, entre otros.

Mantengo tu capacidad de dar amor. Me mantengo cerca de papi, y, aunque no lo creas, mas cerca de tus hermanos. En mi fondo, sigo cortando el pasto; cómo vos. No tengo a Tobi ni Lucas, pero tengo a Nelly; siempre hay un buen perro al cual amar y cuidar. Eso me lo enseñaste vos.
¿Y sabes que? Sigo en el Club. Jugando Rugby. Lamento decepcionarte, pero soy un choto; pero vieras en que gran jugador me he convertido. Esos arboles que plantaste hoy tienen 28 años y ahí, de tanto en tanto, juega Felipe; tu hijo.
El año que viene daré una mano a la Primera, no de la forma que vos pensas, que vos conoces. Se llama Coaching ontológico. Que más da, no importan los detalles. Importa que sepas que ese enamoramiento con el club sigue intacto. Por eso te digo Gracias. Mi vida giro alrededor de eso que iniciaste con 7 años.
Hoy cuido de tus sueños, cuido de tu vida. Tu fragilidad no la oculto más, o al menos en eso estoy trabajando para romper la coraza. Me cuesta.
¿Sabés? No soy veterinario ni profe de educación física. Sigo buscando lo que tanto buscabas… La búsqueda de mi Ser. No quiero ilusionarte, pero siento que está llegando; caso contrario, jamás te hubiese escrito estas líneas.

No debería darte consejos, pero el saber de tus preocupaciones y conocer tu futuro me tienta, solo te tiro unas líneas:

• • No te hagas tanto problema por los líos que hagas. El mundo va a seguir girando.
• • No tengas vergüenza de contar a tus papás y amigos todas y las mil veces que te enamoraste. Las mujeres son algo hermoso que hay que disfrutar y cuidar.
• • Prioriza tus sueños, no los de los demás: Los de papá y mamá, son de ellos. Y de nadie más.
• • Embarrate tranqui, luego te bañas. Mojate, luego te secas. Raspate, luego sopla mamá la herida, Falta al colegio, de grande aprenderás la diferencia entre acumular conocimiento y sabiduría. NO PASA NADA.
• • Hablá con Mamá sobre lo que te pasa, o con papá. O con tus amigos. Ese será el camino para sanar más rápido el Asma.
• 
•  No te avergüences de la enfermedad de mamá y sus secuelas. Disfrútala, porque, cómo todos… abandonaremos algún día esta tierra tal y cómo somos.

Ser chiquito no es una ventaja, ni una desventaja. Es algo hermoso que te pasó, que me está pasando, que sigue dentro mío; que aflora con mi hijo y con mi ganas de seguir siendo vos, cada vez que quiera. Cada vez que pueda. Cada vez que estés al alcance de mi mano.
Te amo, hermoso de mi vida. Gracias compañero. Sigamos jugando.
Wal

 

domingo, 20 de octubre de 2013

A todas las viejas, y las nuevas.

A todas las viejas, y las nuevas.
Las docentes, decentes e indecentes.
Las orgullosas, las que lavan ollas.. propias, o ajenas.
Las que están en el eje X con su pasado, presente y futuro
Las que solo están en el eje Y, en la más profundo de nuestro presente.
Las que volaron o enterraron, desaparecieron o cualquier otra forma de no estar más.
Las buenas. Las que no. Las que no porque no tuvieron opción, y las que no que si tuvieron también.
Las que son por casualidad, amor o violencia.
Las que nos desearon, las que No. Las que nos odiaron y las que ni saben porque pasó.
Las que nos cuidan, las que cuidamos. Las que descuidamos, las que mimamos.
Las que hacen mimos, las que solo son un mimo.
Las creyentes y las que nos hacen creer.
Las que nos enorgullecen, las que nos avergüenzan.
Las que protegen, las que protegen por demás hasta desprotegernos.
a las desprotegidas, golpeadas y dolidas.
A las sonrientes y a las malhumoradas.
a las medicadas y las transigentes.
Las que trabajan afuera, las que trabajan adentro. Las que no trabajan.
Las que tienen lolas, las que no las tienen.
Las autenticas y las tuneadas.
las que son amantes, esposas, solas, segundas, primeras, últimas, amigas, compañeras, malparidas, enemigas, confidentes.
A todas ellas, o a cada pedacito de cada una de ellas... Feliz día. Feliz Vida.
Gracias a la vida nos han dado ellas, gracias a ellas que siguen dando vida.

Walter Rodriguez

miércoles, 16 de octubre de 2013

El espejo en la taberna

Doblado, tirado en su taberna, y con su último aliento se levantó. Y encontró un espejo. Algo jamás visto por El. Y al unísono, por una grieta, un rayo de sol lo perforó. Luego de varios años veía a Febo. El impacto fue tal que solo tendió a protegerse interponiendo delante de sus ojos el espejo. Entonces el haz de luz rebotó. Y cómo un niño jugando lo propagó por toda la cueva. Hizo fuego, mató insectos, dibujó en las paredes.

Entusiasmado salió nuevamente al mundo con su espejo en mano. Cada vez que un animal salvaje atinaba un ataque El solo mostraba el espejo; los animales se veían a sí mismos enfurecidos y, creyendo que era un animal feroz de su misma especie, salían ahuyentados.

El espejo fue un arma letal para caminar por sus días de manera erguida.Sin saber que era, sabía del poder de su espejo. Su espejo era poder. Poder caminar, poder comer, poder reír

Pero al pasar los años, poco más de 3 años, no pudo más con el poder de no poder sentir lo que en la taberna oculto quedó.Y dio vuelta el espejo. Y se vió. Y ahí no termina la historia. Ahí comienza. Gracias a Dios.

  Walter G Rodriguez